Palpa el compost
Si el compost está húmedo, el árbol estará hidratado. Es muy importante que la maceta de plástico tenga un agujero para drenar y que no quede agua acumulada dentro del recipiente de cerámica.
Si por el contrario aprecias que la tierra está seca, es hora de regar. Un litro por planta es la medida apropiada.
Observa las raíces
Con cuidado, dale la vuelta a la maceta, agarra del tronco y extrae la planta. Tranquilo, no vas a mancharlo todo de tierra al hacer esto, ya que saldrá en forma de bloque compacto. Comprueba si el compost de las raíces está seco o húmedo.
En el caso de que te hayas descuidado y lleves mucho tiempo sin atender al cítrico, las raíces estarán muy secas. Entonces introduce la maceta de plástico en un recipiente con agua y la propia planta irá absorbiendo por abajo lo que necesite. Después recuerda retirar el recipiente con el agua sobrante y dejar escurrir la maceta.
Cuida tu planta
Las hojas no necesitan mojarse. Debes regar sobre el compost, repartiendo con calma el agua alrededor del tronco. Es importante colocar la maceta cerca de una ventana para que la planta tenga luz natural.
Por último, si detectas que a tu cítrico de interior se le están cayendo las hojas, probablemente signifique que lo estás regando demasiado y se está ahogando. Es preferible regar con menos frecuencia echando mayor cantidad de agua, que regar un poco todos los días.
Siguiendo estos consejos seguro que tu arbolito lucirá precioso.