El algarrobo o Ceratonia siliqua es una especie de la familia de las legumbres que crece en las zonas más áridas del Mediterráneo. En España se cultiva en la costa levantina, donde se le conoce como garrofera. Su tronco es corto, pero sus ramas son largas y pobladas, siendo por tanto un excelente árbol de sombra en lugares poco lluviosos.
Su fruto es una vaina cargada de semillas, similar al guisante, pero con un color marrón chocolate. Las algarrobas supusieron una importante fuente alimenticia para los españoles en época de penurias. La harina de algarroba tiene un sabor dulce y sirve como sucedáneo del cacao y del café. Además, no contiene gluten, por lo que es un ingrediente perfecto para los celiacos. También se emplea en piensos para el ganado, así como para mejorar la flora intestinal de bebés y adultos.
Por otra parte, la algarroba antaño fue una unidad de medida. Los mercaderes colocaban las especias en un plato de la balanza, mientras que en el otro plato iban añadiendo semillas de algarroba hasta equilibrar el peso. De ahí procede su nombre científico, ya que la silicua también era una unidad de medida. Siliqua es la traducción al latín del griego keration, que posteriormente se convertiría en el quilate árabe.
Ficha técnica:
- Nombre científico: Ceratonia siliqua.
- Nombre común: algarrobo, garrofera.
- Altura: hasta 10 metros.
- Uso: aporta una generosa sombra en terrenos áridos. Su fruto se emplea con fines médicos, así como en la alimentación humana y animal.
- Hoja: perenne, de color verde.
- Floración: verano. Flores rosas, lilas y blancas. Existen árboles macho y árboles hembra.
- Fruto: vaina alargada que contiene legumbres de color marrón oscuro llamadas algarrobas.
- Cuidados: tolera mejor el calor que el frío. Le perjudican los suelos muy húmedos.